Así lo afirmó el reconocido psicólogo en un encuentro que se desarrolló en la Universidad Nacional de Cuyo el viernes 8 de junio. El experto desarrolló su experiencia en las villas de Tucumán donde trabaja con chicas y chicos víctimas del consumo problemático de las drogas.
Por Micaela Iannizzotto
Emilio Mustafá, reconocido por su trabajo en las villas de Tucumán, disertó el viernes 8 de junio en la Universidad Nacional de Cuyo en un encuentro organizado por la Asociación de Docentes e Investigadores de la Universidad Nacional de Cuyo (FADIUNC), el Programa de Capacitación Gratuita Docente (PROCADOC), el Sindicato Unido de Trabajadores de Educación (SUTE), la Mesa de educación popular de Mendoza, la Biblioteca Popular Jesús Nazareno, la Asociación de psicólogxs sociales correinte pichoniana y la Escuela de Psicología Social Enrique Pichón Reviere. Mustafá es además Coordinador del Departamento de Acción Preventiva Comunitaria y trabaja en la Secretaría de Adicciones de Tucumán. Contracara estuvo presente.
En el inicio del encuentro planteó: "Nunca antes en la historia de este país el narcotráfico empezó a afianzarse, nunca antes en este país tenemos barrios completos tomados por chicos en las esquinas consumiendo pasta base de cocaína. Nunca antes en este país se llego a esta dimensión, naturalización y promoción e inducción de consumo de sustancias".
El referente en la problemática de adicciones expuso su modelo de abordaje desde la perspectiva de la Psicología Social de Enrique Pichón Reviere y el materialismo histórico. Así, planteó que se debe trabajar con las víctimas del paco en su entorno, a través de un abordaje comunitario a partir de grupos terapéuticos barriales.
En ese sentido explicó a la radio la Mosquitera: “Hay que generar una estabilización orgánica y psicológica porque al consumir paco, que es la basura de la basura de la pasta base de la cocaína, eso ingresa al cuerpo y genera profundos daños, por eso hay que tratarlo orgánicamente. Pero, cuál era el problema, a un chico lo desintoxicabas y al mes lo tenías de nuevo internado, era un fenómeno de puerta giratoria. El problema era cuando volvía al barrio porque no hay un abordaje completo en todos los niveles”.
Cada vez más pequeñxs
El consumo de drogas se agudizó en Argentina y afecta a las y los más vulnerables. “Se habla del derecho al niño, la pregunta es ¿de qué niño? Si tenemos nenes de 10 años que están consumiendo pasta base, tenemos nenas de 11 años que se prostituyen por una dosis, tenemos chicos que consumen a los 10 y se suicidan a los 15. ¿Entonces para qué clase de niño?”, se preguntó Mustafá y sumó: “En cada lugar nos tenemos que empezar a juntar. Está en juego las generaciones que vienen”
El problema de fondo es el sistema capitalista
La porblemática del consumo se evidencia aún más en el capitalismo y el narcotráfico es funcional a esto. Así, Mustafá manifestó que se debe pensar en el narcotráfico como un momento histórico dentro de un sistema capitalista en su etapa monopólica y el rol que cumple el narcotráfico y las adicciones. "Es un negocio multimillonario, hoy el dinero manda y es promovido por el sistema", señaló.
Asimismo reflexionó: “¿Qué está pasando en este sistema que la sustancia parece como un sostén entre tanta frustración? El sistema genera un profundo vacío. El vacío del que no tiene nada y el que lo tiene todo. El consumo está metido, la droga cumple esa función, es un sostén del sistema para evadir, para aislar y llenar el vacío de esas relaciones deshumanizadas”, y agregó: “Es muy difícil tener alegría cuando tenés hambre. Con paco y hambre no puede haber revolución de la alegría”, en referencia al eslogan de campaña de Cambiemos.
Los gendarmes a las fronteras
El psicólogo expuso que la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, desplegó la fuerza de la gendarmería en los barrios más pobres de Argentina, aunque su función es proteger las fronteras. En ese sentido denunció: “Patricia Bullrich llevó a todas las fuerzas a cuidar las villas pero los gendarmes tendrían que cuidar las fronteras, esa es su función no las villas”.
Y agregó: “Si vamos a luchar contra el narcotráfico no hay que meterse en las villas. Hay que tomar medidas concretas en el sistema financiero, en las cuentas Offshore, en el lavado de los países fiscales, en las transacciones de los bancos, ahí es donde se ataca. El narcotraficante no vive en las villas, el que vive en las villas es un perejil, porque el narcotráfico es financiero”.
Lxs profesionales a las villas
Mustafá explicó que el problema de fondo es el proyecto de vida de las niñas y niños que son adictos a las drogas. “Los profesionales tenemos que estar en las villas y plantear nuevas formas de abordaje clínico terapéutico que aborde la problemática. El punto de fondo es el proyecto de vida. Y el tema es que lamentablemente se está quitando el futuro, hoy se vive el día, viví ya porque no sé qué va a pasar mañana, es lo que te tocó, esto está generado por el sistema”, puntualizó.
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